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Al poner su apellido en el buscador Wikipedia, esta me advirtió que varios internautas estaban en ese instante trabajando sobre el mismo concepto.

Eso no me asombró, pues la repercusión de la masacre a Charlie Hebdo despertó una movilización mundial asombrosa, aunque al paso de los días fueran altas las discrepancias sobre conceptos tan encontrados como libertad de expresión y respeto religioso. 

Lo cierto es que a partir del cobarde atentado contra la revista satírica, este apellido fue más mencionado a escala global.

Charb, Cabu y Tignous, junto al maestro Wolinski ahora forman parte del gran listado de periodistas asesinados por las razones que fueran.

En entrevista con el dibujante y amigo argentino Miguel Rep, había afirmado que en Francia desde que se inventó la imprenta, prácticamente, ya existía la caricatura política, y en un país con dibujantes como Daumier se aprovechaba esta tradición para dibujar a los políticos y estos jamás se sentían ofendidos por eso.

Ser el más longevo de todos los fallecidos no es razón para ser el más reconocido.

Pero su extensa obra desprejuiciada de estilos lo avala como unos de los grandes y por tal motivo es imprescindible no obviar su gran historial o disminuirlo para evitar herir susceptibilidades.

Si en Brasil Ziraldo es lo más representativo del humor gráfico, Rius en México o Nuez lo es en Cuba, Wolinski lo es igualmente en Francia.

A partir de los sucesos de mayo del 68 su obra tomó partido con la causa revolucionaria, su crítica a todo lo impuesto lo convirtió además en un cuestionador de todos los sistemas sociales. Su dibujo sexista fue considerado por algunos como pornográficos, sin embargo, dada su condición de artista irreverente creo que eran representaciones sinceras con su forma de pensar.

Entre tantos reconocimientos por su arte se destacan: El Premio Internacional de Humor Gat Perich, otorgado en 1998. La Legión de Honor, máxima distinción otorgada por el gobierno francés y creada por Napoleón y el Gran Prix de la Ville d' Angoulême, entregado durante el festival Internacional de historieta de la mencionada ciudad.

Independientemente o dependientemente de su obra fue un incondicional amigo de Cuba, algo que dentro de la isla se conoce poco.

Al morir con 80 años era el presidente de honor de la Asociación de amistad CubaSí

Francia, la que además de apoyar a nuestra isla desde Europa acostumbra a hacer donativos  a escuelas, hospitales y damnificados por ciclones.

En la lucha por el regreso de nuestros cinco héroes antiterroristas también fue importante la batalla que libró esta organización.

Como colega nos visitó en tres ocasiones: Durante séptima bienal Internacional del Humor del humor del año 1991, luego en el año 1997 fue el presidente del jurado de la décima edición y regreso a la oncena en el año 1999. En todas cargó con materiales de trabajo para los colegas y contribuyó junto a los Rotativistas Franceses a enviar papel a Cuba para el diario Granma en el momento más crítico del período especial.

A pesar de esas frecuentes visitas jamás lo pude conocer en Cuba, por lo que al asistir a la Fiesta del periódico L Humanité, en al año 2008 no perdí oportunidad de acercármele y expresarle mi admiración. Conversamos y a su solicitud le puse al corriente de cómo andaba el humor gráfico en mi país. También se interesó por su amigo Nuez. Por azahares de la vida el creador del Loquito falleció el pasado 6 de enero y justo cuando en La Habana se realizaban sus funerales, supimos del asesinato de Wolinski y los colegas de Charlie Hebdo.

Mi primer viaje al país galo fue gracias a la colaboración del ingeniero Sebastian Viscuso directivo  del sindicato eléctrico CCAS, y la embajada cubana en Francia con motivo del 27 Salón Internacional de humor de Saint Just Le Martel. Precisamente en Limoges, donde celebra ese salón desde hace más de 30 años, volví a encontrarme con  Wolinski.

Sobre su última acción de solidaridad con Cuba, nuestro embajador en el país galo, Héctor Igarza, dejó testimonio en la edición del periódico Trabajadores del 12 de enero de 2015. En ella se muestra el diseño de la postal que por el 57 aniversario del triunfo de la revolución dibujara el maestro. Según Charlie Bouhana, presidente en ejercicio de Cubasí Francia este era el último dibujo realizado por  Wolinski.

Una exposición en Cuba con parte de la obra de estos colegas franceses, por demás todos amigos de nuestro país, contribuiría a honrarlos.  

Georges Wolinski, fue un periodista y un humorista gráfico francés. Nació el 28 de junio de 1934 en Túnez y murió asesinado junto a colegas el 7 de enero de 2015 en París.

Nota: Agradecimientos a nuestra embajada en Francia