Correr es un Placer.
SIEMPRE he admirado a esos atletas
que recorren kilómetros y kilómetros en
franca carrera, no solo en busca de llegar
primero a una meta lejana, sino
también en un compromiso consigo
mismos: finalizar, cualquiera que sea el
lugar y el tiempo consumido en el recorrido.
La carrera de fondo es mi deporte
preferido; y en el fondo quisiera ser
uno de ellos, aunque en realidad no fui
diseñado para ese ejercicio. Con más
de 50 años, aún no tengo claro para
qué fui diseñado, pero soñar no cuesta
nada. Me veo como uno de aquellos
antiguos mensajeros que trotaban cientos
de millas, para llevar la noticia del
último combate o la próxima epidemia.
Correr, correr&, aunque en ello les fuera
la vida. La entrega y resistencia de
esos guerreros del camino fue la semilla
que dio lugar a la carrera de maratón.
Martí habló de tres metas importantes
en la vida: tener un hijo, escribir un
libro y plantar un árbol. Yo agregaría
correr un maratón. Es envidiable la concentración
y el control físico que requiere
esa empresa. Más de cien minutos
en soliloquio constante. Más de dos
horas repasando tu existencia, tus planes,
tus logros. Es necesario tener muy
alta la autoestima. Quizá por eso algunos
terminan antes, porque hubo un
momento en que no les gustó algo de
lo que acudió a su mente. No es mi
caso, en mis 15 minutos de carrera promedio,
en mi monólogo interno, apenas
supero la infancia y como todos saben:
de niño no vale.
Hay un nuevo recurso que te permite
mayor concentración y evadir ciertos
malos pensamientos: la música con
audífonos. En carreras oficiales no está
permitido. También debía estar prohibido
para los peatones que se enajenan, se
abstraen y causan accidentes.
Hago este comentario porque hoy,
desde muy temprano, incluso antes de
que este periódico llegara a sus manos,
se dio la largada de la trigésima edición
del Maratón Internacional de La Habana
(Marabana). Cientos de corredores, atletas
profesionales y aficionados de múltiples
países, al darse la acostumbrada
arrancada, frente al Capitolio, salieron
con la intención de recorrer 42 kilómetros
de nuestra capital, o quizá los 21 de
la media maratón, entre otras modalidades.
Este evento se ha convertido en la
actividad física de mayor participación,
en forma simultánea, de las que se convocan
en Cuba.
No es casual que un día como hoy se
ejercite el músculo a plenitud. Ayer celebramos
el Día de la Cultura Física y el
Deporte, jornada escogida desde 1985,
pues el 19 de noviembre de 1961 fue la
clausura de la Primera Plenaria de
Corresponsales Voluntarios Deportivos,
quienes jugaron un papel relevante en el
surgimiento y desarrollo del deporte revolucionario.
Nadie puede negar la importancia
que se le concede a la práctica
deportiva en nuestro país. Aunque sea
«la lucha» diaria del cubano, el ejercicio
que más predomine, son millones los
hombres y mujeres, de todas las edades,
quienes se incluyen en la práctica
de algún deporte.
Los periodistas no están exentos de
esta experiencia. Recién concluyó el 18
Torneo Nacional de Softbol de la Prensa,
que tuvo como feliz sede los predios
mayabequenses. En representación de
distintas provincias, varios equipos toparon
durante una semana en pos del
cetro. Las Tunas, Holguín, Camagüey y
los Vaqueros de Mayabeque estuvieron
entre los mejores. Los Galácticos de
Medios Nacionales, por la capital, resultaron
incontenibles y se coronaron por
sexta vez consecutiva. Para todos, nuestra
felicitación. También para el deporte
cubano, para el pueblo de esta Isla y su
30 Marabana-Maracuba.